
Un informe sobre bienestar animal en ovinos, elaborados por expertos del SENASA y el INTA, destacó las claves para la cría, la faena y el traslado de los animales.
El estudio avalado por la Mesa Ovina Nacional, destacó que «los ovinos son especies de naturaleza sociable, vista aguda, excelente audición y fuerte tendencia gregaria, una condición que debe ser aprovechada para manipularlos y transportarlos».
«Al separarlos del grupo para inspecciones individuales, los animales se agitan y forcejean para volver a
la majada. Conviene evitar toda actividad que pueda asustar, herir o agitar a los animales. Se pueden mostrar hostiles a la introducción de nuevos individuos en el grupo, provocando víctimas, sea por agresiones físicas o porque los animales más débiles son impedidos en el acceso al agua y a los alimentos», precisaron.
Y añadieron: «Las ovejas son conscientes de sus alrededores (potreros, vegetación, aguadas, instalaciones, perros, personas y actitudes) y pueden reconocer los rostros de diversos individuos y si estos son amigables o no. A su vez reconocen voces y olores que, junto con las expresiones faciales y corporales del
hombre, forman un complejo sistema que debe funcionar lo más adecuadamente para no provocar estrés y resistencia y, de esta manera, realizar un trabajo más eficiente y en menos tiempo. Así mismo,
reconocen a sus congéneres y se establecen relaciones grupales, familiares entre hembras, hijas y camada»
El informe que publicado por el ministerio de Agricultura y Ganadería de la Nación destacó que «para el traslado, si deseamos que avancen, debemos situarnos levemente por detrás del punto de balance pero fuera de la zona ciega». En cambio, si queremos que la majada retroceda «nos debemos situar levemente por delante del punto de balance». Advirtieron que «los grupos de ovinos se movilizan haciendo curvas,
comportamiento que se debe considerar al momento de arrear a una majada».
Bienestar animal en ovinos
El término bienestar animal designa el estado físico y mental de un animal en relación con las condiciones en las vive y muere. Las personas encargadas del manejo de los ovinos en cada eslabón de la cadena son responsables del «tratamiento ético y del bienestar de los mismos».
Los especialistas de INTA y SENASA destacaron que, «para lograr resultados favorables es necesario
que adquieran conocimientos, experiencias y habilidades para implementar procedimientos y
técnicas de manejo tendientes a garantizar el bienestar de los animales».
Los principios de un manejo ético adecuado deben considerar las necesidades sociales,
de comportamiento y fisiológicas de los ovinos contemplando los siguientes aspectos:
- Los ovinos son animales gregarios que prefieren vivir con otros ovinos formando majadas.
- Necesitan un suministro de alimento adecuado para mantener una adecuada salud y
bienestar, atendiendo a las necesidades fisiológicas. - Deben acceder a una provisión de agua de calidad y en cantidad suficiente para satisfacer sus requerimientos fisiológicos.
- Los procedimientos de manejo deben minimizar el riego de lesiones o enfermedades.
- Si son confinados deben contar con suficiente espacio para acostarse, pararse, estirar sus
extremidades y desarrollar patrones normales de comportamiento. - Deben ser manejados en instalaciones y con equipos adecuados que minimicen el
estrés. - Deben ser provistos de tratamientos sanitarios son conscientes de sus adecuados, lo cual puede incluir el sacrificio humanitario si fuera necesario.
- Debe minimizarse el riesgo de predación en todas las etapas del ciclo productivo.
- Ante situación de disminución brusca y repentina de la disponibilidad de forraje deben acceder a
fuentes suplementarias de alimento, por lo cual es necesario contar con un plan de contingencia para emergencias climáticas. - Evitar procedimientos que impliquen sufrimiento a menos que sea estrictamente necesario y, en ese caso, extremar las precauciones para que sea lo menos intenso y prolongado posible.