
«La leche de burra tiene un parecido notable con la leche materna en sus características nutricionales e inmunológicas», afirmó el doctor Rafael Ramos, quien disertará sobre «la realidad médica del consumo de leche de burra», durante las jornadas Argentinas de Producción de Burros que se realizarán el 21 y 22 de noviembre, en Santa María Catamarca.
En diálogo con Portal Ovino, el especialista que desde hace 40 años ejerce la medicina, ponderó los aportes de la leche de burra. Ramos nació en el Valle Calchaquí, una región donde el conocimiento ancestral se transmite de generación en generación.
«Al animal de carga lo trajeron los españoles y en situaciones extremas se empezó a consumir. Es un aprendizaje de mucho tiempo. Desde el punto científico, la leche de burra tiene un parecido notable con la leche materna, en sus características nutricionales e inmunológicas», precisó.
El médico recordó que consumió leche de burra «siendo niño, cuando nuestros padres nos decían que era ideal para combatir la tos convulsa»
«Con los estudios se ha determinado que los anticuerpos que tiene la leche de burra son muy parecidos a la materna, aunque no todas las personas pueden consumir la leche de burra. Como cualquier alimento de origen animal, puede producir reacciones alérgicas. Siempre es recomendable consultar al médico», sostuvo.
Y agregó: «Particularmente, en aspectos dermatológicos, se ha generado evidencia científica sobre su eficacia. A lo largo de la historia, la leche de burra fue utilizada para mejorar las condiciones de la piel, hay mucho de cultura ancestral»
El médico catamarqueño dijo que la leche de burra «es buena para el descenso del colesterol, que es un factor capaz de provocar accidentes cardiovasculares», aunque advirtió que «el desconocimiento es un factor que afecta un consumo mayor, además de que existen alimentos más fáciles de adquirir y más baratos».


Ramos dijo que «la leche de burra debe ser producida en estrictas condiciones y son escasos los lugares donde se los puede conseguir, acopiar y cumplir con las normas vigentes»
«En nuestra región el consumo de la lecha de burra era al pie la burra. Dermatológicamente es muy recomendable para la soriasis o el acné. Tiene efectos extraordinarios, con resultados excelentes. También es una sustancia humectante capaz de generar beneficios a pacientes oncológicos, con dificultades en la piel», describió.
El especialista dijo que existen «caramelos que tienen efectos sedativos para ataques de tos» y remarcó que se impulsan nuevas investigaciones por otros beneficios a la salud.
«Es fundamental la formación de especialistas médicos que puedan valorar la eficacia y beneficios de la leche de burra», ratificó.