
La cadena de producción ovina en la Región Centro del país apunta profundizar un desarrollo con mayor volumen, producción diversificada y valor agregado.
Uno de los objetivos es el trabajo sobre un protocolo de producción del “cordero pesado” para llegar a animales de 35 a 45Kg/Vivo y 3.5 CC., así como la categoría diente de leche (Res 14 – 22kg). Así lo acordaron en febrero pasado referentes del sector ovino y funcionarios de la secretaría de Ganadería de la Nación.
La clave es “salir de la estacionalidad de oferta, realizar cortes versátiles, adecuándose al consumo y compra actual; aumentando la frecuencia de consumo, incorporando variedad a los hábitos alimentarios y una mayor oferta gastronómica”.
En cuando al fomento de las exportaciones se analizaron cuestiones sanitarias para la comercialización de mercados como la Unión Europea o de impulso y promoción en otros países.
También se impulsa la producción de leche ovina, con la pretensión de incorporarla al Código Alimentario Argentino”, y continuar con el Programa Nacional para el Consumo de Carne Ovina “Cordero Argentino”.
La Región Centro intenta generar oportunidades de negocios a partir de agregado de valor de las lanas gruesas y rústicas que no tienen valor textil.
La Región Centro es la de mayor crecimiento en producción y agregado de valor en la cadena ovina en los últimos años y cuenta con condiciones edafo- climáticas beneficiosas, permitiendo producir en diversas épocas del año. Además, allí se producen tanto corderos livianos como pesados, lo que genera mano de obra y arraigo rural, y concentra el mayor porcentaje de consumidores a nivel nacional.