
Los Mayines es la consecuencia de una exitosa experiencia de productores ovinos del partido de San Cayetano, al sur de la provincia de Buenos Aires. Hace poco más de una docena de años comenzaron a escribir su historia, con el desafío de «diversificar la forma de ofrecer la producción y poner en valor su
carne».

Según relataron en la revista oficial de Ministerio Agrario, «los inicios fueron como un grupo de Cambio Rural del INTA, dependiente de la Chacra Experimental Integrada Barrow (MDA-INTA)»
Estaban integrados por 12 productores agropecuarios, que luego de atravesar distintas etapas de trabajo
decidieron convertirse en una sociedad anónima para explorar los canales comerciales y lograr valorizar la carne de cordero. «Hoy está conformado por 10 productores que trabajamos coordinadamente para acopiar carne ovina, procesarla y colocarla en el mercado. Todos tenemos algo en común: queremos darle valor agregado a la producción ovina y posicionarnos en la región y por qué no en el país y en el mundo con carne ovina de calidad», expresaron.

Y añadieron: «Somos un grupo de entusiastas. Compramos un terreno en el parque industrial de San Cayetano y allí comenzamos a armar primero un contenedor de frío, después sumamos uno más y pusimos la sala de trozados. Nos faltaba para lograr la habilitación determinadas cosas que después fuimos aprendiendo. Es ahí donde destaco la importancia de la interacción público-privada»

«La verdad es que más allá de que en el municipio y en la provincia de Buenos Aires hubo diferentes partidos políticos nunca sentimos que fuera un obstáculo, siempre tuvimos un excelente diálogo con la municipalidad y con toda la gente del Ministerio. Uno siente que está acompañado», enfatizaron.
En el relato remarcaron que «la falta de frigoríficos para faena cerca hace que realicemos viajes periódicos a Necochea o Tres Arroyos».
«Se hace la faena allí y la mercadería vuelve con frío aquí donde la trozamos y la envasamos al vacío. Esto nos permite hacer porciones más chicas que facilitan su adopción. Tenemos una cámara, donde guardamos los cortes congelados para venderlos en el momento en que haya demanda», precisaron.
Desde Los Mayines apuntan a producir carne ovina de calidad «con todo en regla. «Subrayamos esto porque en el comercio de carne ovina reina la informalidad y así es difícil crecer e instalarla como una alternativa, más allá de algún cordero al asador», reconocieron.
Fotos: La Voz del Pueblo