
Desde la Asociación Argentina de Productores de Merino valorizaron la aplicación de programas de mejoramiento «que permitieron un importante avance en el desarrollo de las majadas Merino del país».
«Nuestro desafío es dar continuidad e inclusión a todos los productores, siempre el objetivo es generar programas de bajo costo y alto impacto de manera que el mejoramiento esté disponible para todo el espectro productivo», señalaron en el informe anual.
Desde la organización precisaron que «el Merino Puro / Merino Base es un servicio integral de diagnóstico de las majadas, de fácil acceso, e iniciar un plan de mejoramiento genético basado en la selección de madres y adquisición de carneros mejoradores, con datos objetivos provenientes del Provino y/o del programa Merino Puro Registrado (MPR) de la Asociación».
«El programa está orientado a iniciar un programa de mejoramiento genético en el cual, a partir de un diagnóstico inicial de pureza racial, de taras y características productivas de la majada, se lo asesora en el diseño de un plan de mejoramiento genético según los estándares de la AACM y del objetivo del productor, definiendo metas concretas a lograr por parte del productor interesado», señalaron.
En relación al Merino Puro Registrado, destacaron que «las virtudes de un programa basado en mediciones objetivas»
«Ha sido preocupación histórica de la AACM poder generar programas mejoradores, de bajo costo de implementación, que permitan obtener mejoras sustantivas de nuestras majadas. La evolución de estos programas nos lleva a recordar el origen de una primera metodología aplicada desde la década del 60 hasta mediados de los 90, el que se conoció como Puro por Cuza», destacaron.
Y añadieron: «Debemos señalar que este se sostenía solamente en la apreciación visual de los animales involucrados. La evolución de este programa demostró que la observación visual si bien es importante es insuficiente, por lo cual se acordó necesario agregar la nueva herramienta tecnológica disponible, que en ese momento eran los Índices de Selección, al sistema de evaluación dando origen al Proyecto Puro por Cruza (año 1995)».
«A este programa, la Comisión Técnica de nuestra entidad y el equipo de genética de INTA comandado por el Ing. Joaquín Mueller, incorpora el uso obligatorio del Provino, dando inicio al Merino Puro Registrado, generando una certeza mayor en los resultados», enfatizaron.
Desde la Asociación resaltaron «esta búsqueda de mejora continua se ve reflejada en la evolución del programa, habiendo sido inspeccionadas a la fecha más de 200.000 hembras y más de 33.000 carneros».