«El perro Pastor Maremmano ha sido una respuesta efectiva contra los predadores», afirmó la productora y dirigente ruralista, Rosa Dellafiore, tras disertar en a charla ovina que se desarrolló en la escuela técnica «Elena Ossola de Horas», de Naschel, en San Luis.
En diálogo con Portal Ovino, Dellafiore, integrante de la Red Regional Ovina del Sur, destacó la participación del ingeniero Néstor Franz y la médica veterinaria, Victoria Nievas.
La productora sostuvo que «los productores tienen mucha preocupación por el ataque de predadores a las majadas» y apuntó contra «la agresión de pumas, perros salvajes, zorros y jabalíes»
«En el uso y manejo de los perros Pastores Maremmano se han encontrado soluciones. Son animales exclusivamente destinados al cuidado y resguardo de las ovejas», precisó.
Y agregó: «La idea es hacer conocer el trabajo que realizamos en Córdoba y en las provincias vecinas»
«Hay una gran ventaja que tiene el productor que cuenta con los perros Pastores, que son herramientas vitales en la producción», subrayó.
El Pastor de Maremma es un perro grande, robusto y musculoso y tiene un manto superior blanco áspero y un manto inferior protector denso. La cabeza es ancha entre las orejas y se estrecha hacia el hocico.
Las orejas son pequeñas y están situadas en la parte alta de la cabeza. Los machos adultos miden entre 65 y 73 cm y pesan de 35 a 45 kg y las hembras miden entre 60 y 68 cm y pesan de 30 a 40 kg.
El perro Pastor Maremmano se siente realizado cuando tiene la oportunidad de trabajar, especialmente cuando está cuidando a su rebaño, lo que refleja su naturaleza de protector y guardián. Es un animal fiel y devoto tanto a su amo como a su grupo, mostrando una dedicación inquebrantable a su deber.
Sin embargo, su lealtad no se extiende a los intrusos, a quienes enfrenta con gran valentía y determinación. Esta característica lo convierte en un excelente perro guardián, lo que ha sido demostrado en múltiples ocasiones a lo largo de su historia. Debido a su gran tamaño y fuerza, es crucial comenzar a socializarlo desde temprana edad para garantizar que sea manejable y equilibrado en su comportamiento.
